¿Líder o Jefe? ¿Qué conviene más en mi empresa?

Esto se define como “Alta Gerencia”. Así que hay que leer bien antes de opinar sobre la realidad del tema.

En un tiempo en el que se habla solo de liderazgo y en el que se busca eliminar la figura del “jefe”, hay que conocer cuáles son las diferencias entre cada uno.

El líder es la persona responsable de guiar, gracias a un conjunto de habilidades, a un equipo hacia un objetivo o hacia una gran visión y/o misión. Se centra en lo estratégico, en dar directrices, en ver oportunidades. Explica, socializa, escucha y busca consenso. Vela siempre por un buen clima organizativo y empatiza con sus colaboradores.

El líder no necesariamente tiene las habilidades para ser jefe, aunque tiene un gran nivel de influencia en su equipo.

El jefe es quien se encarga de ejecutar esa lista de tareas que lleva al objetivo o a la visión. Es más operativo y ejecutor, se le mide por la efectividad de su gestión. No es necesario que explique de manera detallada las estrategias que deben ser implementadas, más debe asegurarse de que se haga. Tiende a ser más autoritario (lo que no está mal) y tiene altos niveles de exigencia. Debe ser disciplinado y tiene límites marcados en su jerarquía.

Ambas figuras son necesarias en una empresa o negocio. En ocasiones y con un manejo excepcional de inteligencia emocional, puede ser una misma persona, que es lo ideal.

No siempre podremos, en base a un liderazgo, avanzar con un equipo, dependerá de muchos factores y capacidades de ese conjunto de personas. Lo importante es saber diferenciar cuándo utilizar cada figura para llegar a la meta deseada.

Es tiempo de dejar de satanizar a “los jefes” y ubicarlos en el lugar que les corresponde dentro de la organización.